Si tu hijo es gracioso, le grabas en vídeo y triunfa en YouTube: la plataforma de vídeos te propone un negocio. YouTube ofrece a las familias que suban vídeos divertidos como los protagonizados por los niños, repartirse el dinero de la publicidad. El acuerdo consiste en que los padres recibirían parte de los ingresos conseguidos con los anunciantes que aparezcan junto al video.
YouTube abre varias vías de negocio. O bien es la empresa en cuestión quien habla con el usuario, o a la inversa. En caso de que alguno de los vídeos subidos triunfe, es la propia plataforma quien se pone en contacto con el usuario para ofrecerle dinero por su vídeo, según ha comunicado el diario británico ‘The Telegraph’. De otro modo, también podría ocurrir que sea la propia familia quien hable con YouTube para abrir un canal si creen que vídeo puede causar furor en la web.
El beneficio de este modo sería mutuo. Es decir, YouTube verá incrementar sus ingresos publicitarios gracias a las visitas conseguidas con los niños, mientras que los padres recibirán parte del dinero conseguido por la publicidad por tan solo subir un vídeo a la web.
Por ejemplo, éste es el caso de una familia estadunidense que recibieron más de 100.000 dólares por conseguir más de 400 millones de visitas con un vídeo, protagonizado por su hijo menor, y en el que aparece mordiéndole el dedo a su hermano mayor.
YouTube abre varias vías de negocio. O bien es la empresa en cuestión quien habla con el usuario, o a la inversa. En caso de que alguno de los vídeos subidos triunfe, es la propia plataforma quien se pone en contacto con el usuario para ofrecerle dinero por su vídeo, según ha comunicado el diario británico ‘The Telegraph’. De otro modo, también podría ocurrir que sea la propia familia quien hable con YouTube para abrir un canal si creen que vídeo puede causar furor en la web.
El beneficio de este modo sería mutuo. Es decir, YouTube verá incrementar sus ingresos publicitarios gracias a las visitas conseguidas con los niños, mientras que los padres recibirán parte del dinero conseguido por la publicidad por tan solo subir un vídeo a la web.
Por ejemplo, éste es el caso de una familia estadunidense que recibieron más de 100.000 dólares por conseguir más de 400 millones de visitas con un vídeo, protagonizado por su hijo menor, y en el que aparece mordiéndole el dedo a su hermano mayor.
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